Las pesquisas en torno al doble asesinato de un conductor de plataforma digital y su clienta, llevaron a los investigadores a ubicar una banda de “narcosatánicos”, liderada por una mujer que pertenece a la pandilla Artistas Asesinos que desde el Cereso número 3 dirige Osvaldo Alonso M. H., alias “El Niko”, el cual presuntamente es el que ordenó exterminar “mexicles”.
En conferencia de prensa el fiscal de Distrito Norte, Carlos Manuel Salas, dijo que esta célula criminal es una de las más violentas en la ciudad, conformada “por gente perversa”.
Además de desmembrar a las víctimas, grababan las atrocidades cometidas en video y la líder ofrendó, al menos, dos corazones humanos al diablo.
Michelle Angélica P.V., fue identificada por el fiscal Salas como la líder de la banda y contra quien ya existe una orden de aprehensión en su contra; esta persona es adoradora de la Santa Muerte al igual que “Nikillo”. Dentro de la casa y un vehículo propiedad de la mujer se encontraron entre las evidencias figuras de la también llamada “niña blanca”.
En una de las viviendas cateadas los peritos especializados encontraron dos corazones, uno putrefacto y otro aún fresco, que presuntamente utilizó Michelle Angélica en sus rituales, además localizaron otros restos humanos.
Estos hechos trascendieron ayer durante la continuación de la audiencia inicial por el delito de homicidio calificado en contra de Jorge G. M. y Joana Michell A. G. en perjuicio de Álvaro Rivera Morales y una mujer que ingresó al Servicio Médico Forense con el número de registro SIEC 2240/2023/37, según la causa penal 6841/2023.
Este es el tercero de los cuatro asesinatos registrados contra choferes de plataforma digital que la Fiscalía General del Estado esclarece y obtiene el auto de vinculación a proceso contra los acusados.
El sábado 25 de noviembre a las 11:25 horas fue reportado el hallazgo de una persona sin vida en el cruce de las calles Guillermo Máynez y Valle de San Bartolomeo del fraccionamiento Valle de Allende.
En el lugar abandonaron dos cadáveres maniatados en la cajuela de un vehículo marca Nissan, Línea Note, modelo 2015, con placas de circulación EGL-549-B nacionales. Fue la esposa del conductor la que identificó la unidad a través de los diversos medios de comunicación y acudió a reconocer el cuerpo.
El hombre se encontraba envuelto en un cobertor color café con blanco y atado con alambre eléctrico color rojo, con 2 vueltas y 3 nudos en el cuello y con una vuelta y tres nudos en los tobillos.
La cabeza estaba parcialmente cubierta y un nudo fijo ataba el cobertor por la parte superior del cuerpo. La causa de muerte fue asfixia por estrangulamiento y al momento de ser realizada la autopsia tenía de 8 a 16 horas de muerto.
En el caso del cuerpo de la mujer que ingresó con el SIEC 2241/2023/37, tenía la cabeza cubierta con una toalla sujetada con un alambre. Los miembros torácicos estaban sujetados con alambres rojo y verde a nivel toracoabdominal, y entre sí, a nivel de las muñecas.
También encontraron un cable rojo que sujetaba los muslos entre sí y un cable negro que sujetaba las piernas y los tobillos. La causa de muerte fue estrangulamiento y traumatismo craneoencefálico, según la necropsia.
El conductor fue reconocido hasta el 27 de noviembre. Para el 9 de diciembre, los investigadores acudieron a la vivienda ubicada en las calles la Hacienda de Medina, sin numeral visible y Hacienda de Grajeda, en el fraccionamiento Sierra Vista, domicilio al que el chofer prestó el servicio a su clienta.
Cuando los agentes y peritos llegaron a la vivienda fueron recibidos por Joana Michell, quien estaba en compañía de Jorge G.M. La defensa de los acusados dijo que ambas personas fueron detenidas en otro lugar cuando tripulaban un vehículo color gris e iban acompañadas de otra mujer, la cual quedó en calidad de testigo protegida.
En la casa encontraron cuchillos, machetes, hachas y órganos humanos, así como evidencia de sangre que se obtuvo con luminol, ya que en esa propiedad realizaron varios descuartizamientos, según acusó el Ministerio Público.
Otra adolescente que pertenecía a esta célula delictiva compareció ante la representación social y declaró haber pertenecido a la pandilla “AA”, de la que “no se podía salir con vida”. Aseguró que fue “tableada” por la líder, la cual supuestamente llegaba a pagar dos mil pesos por asesinato.
La declaración de Jorge G.M. respecto al crimen del conductor de una plataforma digital cita:
“A los otros, que era un hombre y una mujer, que llegaron en un carro rojo nada más los ahorcamos, eso fue hace como un mes ahí en la casa de Sierra Vista, cuando yo llegué ahí a la casa ya los tenían amarrados ‘Chaco’, Michell P., el ‘Daddy’, Joana Michell, y la ‘Pao’, después de que los ahorcamos, los envolvimos en cobijas”, dijo.
Agregó que subieron los cuerpos al asiento trasero del carro rojo.
“Fue en el mismo en el que llegaron los que matamos. Ahí manejó ‘Chaco’ el carro rojo y nosotros íbamos en el otro carro gris, Michell P. iba manejando, también iba Joana Michell, Pao y yo, de ahí los llevamos para Valle de Allende y ahí dejamos a los muertos y el carro rojo, no sé quiénes eran ellos, pero la mujer era gordita, blanca, cabello negro como con rojo o rosa y el bato era flaco”, declaró el acusado ante la representación social.
La declaración de Joana Michell en torno al crimen del conductor de la plataforma digital dijo: “también supe de otros dos muertos, era un hombre y una mujer, fue también en la casa de Michell, de la Sierra Vista; ellos (las víctimas) llegaron en un uber color rojo, cuando yo llegué ellos ya estaban amarrados y ahí también estaban Pao, ‘Chaco’ y de rato llegó Michell P., Chuky (Jorge G.M.), y otro que le decían ‘Daddy’, a él no lo conocía”, narró.
Dijo que según ella supo, “la mujer asesinada había tenido qué ver en la muerte de una persona, entonces al muchacho (chofer), entre ‘Chaco’ y ‘Daddy’ lo asfixiaron con un cable en el cuello y a la muchacha, Michell le puso una bolsa en la cabeza y la asfixió y después de que los asfixiaron, los envolvimos en cobijas y los subimos en el asiento de atrás del carro rojo que fue en el mismo en el que llegaron.
“El ‘Chaco’ fue el que manejó el (carro rojo) y los demás nos fuimos en el carro gris Elantra de Michell y los llevamos para Valle de Allende y ahí dejamos a los muertos y el carro rojo, no supe quiénes eran, pero la muchacha era alta, gordita, blanca pelo negro con rojo y el hombre era flaco, alto, moreno”, expuso.
La testigo protegida dijo que el pasado 24 de noviembre como las 10:00 de la noche, estaba en la casa de Michell P., y la acompañaban Michell A., Alan Rubén, Jorge G.M. alias ‘Chuky’, ‘Mono’ y (Ezequiel) ‘Cheque’.
“Entonces llegó una muchacha que era conocida de Michell, porque fueron compañeras en la cárcel, ahí supe que se llamaba Alejandra, porque no la conocía de antes, dijo que había llegado en su uber personal, que era un Nissan color rojo. Entonces Alejandra pasó a la casa y dijo que la habían mandado del Cereso para decirles que unas personas que habían matado a una muchacha, que era hija de una persona de ahí adentro del Cereso”, declaró.
Michell Pineda, como la identificó el fiscal Salas en la conferencia de prensa que ofreció ayer y fue transmitida en la red social Facebook, le pidió el teléfono a Alejandra para revisárselo y ella se lo dio y lo empezó a revisar, entonces se encontró una conversación de Alejandra con una persona que había matado a la hija del señor del Cereso y, entonces como el uber la estaba esperando, le pidió a Alejandra que le dijera al chofer que entrara a la casa.
“Alejandra le marca por teléfono para que entrara a la casa, entonces entró el chofer y entre Alan Rubén, el ‘Mono’, ‘Chuky’ y ‘Cheque’, lo empezaron a golpear y se lo llevaron al cuarto y lo amarraron”, dijo.
Agregó que a Michell le hablaron por teléfono y ella contó lo de Alejandra y le ordenan que la matara.
“Al señor del uber lo empiezan a asfixiar Alan Rubén, ‘Cheque’, ‘Chuky’ y Mono’, hasta que se muere, entonces Michell le puso ‘teip’ a Alejandra en toda la cara, le deja sólo la nariz destapada, entonces le dicen que la van a sacar y que la ‘teipiaron’ para que no supiera de dónde salió, entonces cuando se levanta, Michell le pone una bolsa de hule en la cabeza hasta que se cae de frente y ya se queda sin vida”, agregó.
Explicó que entonces “encobijaron el cuerpo de Alejandra para sacarla de la casa y al chofer sólo le envolvieron la cabeza con una toalla y lo amarraron con cables, para luego meterlos en el mismo vehículo en el que llegaron y el ‘Cheque’ los fue a tirar a Valle de Allende y los demás nos fuimos en el carro de Michell Pineda”.
La testigo dijo que estos hechos fueron videograbados con el teléfono de la mujer identificada como Alejandra.
La jueza ayer resolvió vincular a proceso a las dos personas acusadas por el delito de homicidio calificado en calidad de coautores, según los artículos 123,124, 127 y 136, fracción II, inciso B y fracción IV, estos dos últimos los reclasificó, del Código Penal vigente.
A petición del Ministerio Público otorgó un plazo de cuatro meses para el cierre de la investigación complementaria y ratificó las medidas cautelares de prisión preventiva contra las dos personas acusadas, que se encuentran confinadas en los Ceresos 2 y 3 en esta ciudad.