El submarino alemán UC-71, que hundió más de 60 barcos comerciales en el mar del Norte durante la Primera Guerra Mundial, terminó en el fondo del mar frente al archipiélago de Heligoland el 20 de febrero de 1919, mientras era transferido a la Marina británica, según los acuerdos alcanzados tras la firma del armisticio donde Alemania debía entregar toda su flota, informó RT.
En un telegrama enviado por el capitán de la embarcación, fechado el 26 de febrero de aquel año, se nombran el mal tiempo y el fuerte oleaje como causas del naufragio, aunque abundaban las teorías de que fue hundido por su propia tripulación.
Desde entonces, el sumergible de 50 metros de eslora se encuentra a 22 metros de profundidad en el océano y se convirtió en un imán para los buceadores antes de que se le concediera protección legal.
Sin embargo, aún quedaban dudas sobre lo que realmente sucedió con la nave. Ahora, el profesor Chris Rowland, experto en visualización 3D de entornos submarinos, y la profesora Kari Hyttinen, ambos de la Universidad Dundee (Escocia), han afirmado en un comunicado publicado este jueves que tienen pruebas de que el submarino fue hundido deliberadamente.
Durante varias inmersiones a la nave, Rowland y el arqueólogo Florian Huber utilizaron cámaras de última generación e iluminación de alta intensidad para tomar fotografías y videos que les permitan captar imágenes detalladas de los restos. Así, los expertos crearon un detallado plano en 3D del sumergible.
“Las escotillas ciertamente están abiertas en todo el submarino, lo que corrobora la afirmación de que fue hundido deliberadamente”, explicó Rowland. “Este naufragio se diferencia de muchos otros porque fue hundido por un acto de rebeldía, no por un acto de guerra”, agregó.
En este sentido, señaló que “aunque el fin conflicto pudo haber sido declarado, aquellos que navegaban en submarinos como el UC-71 todavía sentían una tremenda lealtad hacia su tripulación, su barco y su nación”.