El caos del pitcheo de los Tigres puede esperar. Tarik Skubal puso las cosas en orden en el Juego 1.
La procesión de abridores, relevistas largos y especialistas que ayudaron a Detroit a llegar a su primera postemporada en 10 años tendrá dos oportunidades para ayudar al club a ganar su primera serie de playoffs desde el 2013 gracias a Skubal, cuyo debut en octubre estuvo a la altura de las expectativas.
Con seis innings en blanco y seis ponches, el ganador de la Triple Corona de pitcheo de la Liga Americana humilló a una alineación de Houston que ha hecho del béisbol de octubre un ritual, guiando a los Tigres a una victoria de 3-1 en el Juego 1 de su Serie del Comodín de la L.A. en el Minute Maid Park el martes.
La alineación de Houston no pudo anotar hasta un noveno inning lleno de tensión, que terminó cuando Jason Heyward conectó una línea directo al guante del primera base Spencer Torkelson para el out 27.
“Fue increíble”, dijo el receptor Jake Rogers. “El ambiente fue genial. Siempre parece que está muy ruidoso cuando venimos aquí, pero hoy parecía un poco más fuerte. Ese noveno inning fue una locura, pero lo logramos. Conseguimos la victoria”.
La victoria no solo recupera el impulso que los Tigres construyeron en su marcha hacia un puesto de Comodín al final de la campaña, sino que también les da una ventaja estadística en la serie. En la breve historia de las Series del Comodín al mejor de tres juegos, los equipos que ganan el Juego 1 han avanzado 14 de 16 veces. Los clubes que pegaron primero como visitantes han avanzado en 8 de 10 ocasiones, incluyendo siete barridas en dos desafíos.
Los Astros llegaron a la serie no solo con la ventaja de jugar en casa, sino con la de la experiencia, con un total de 103 juegos de postemporada desde el 2015. También tenían la experiencia de haber vencido a Skubal, propinándole una de sus cuatro derrotas en la temporada regular, en lo que probablemente termine siendo una campaña ganadora del premio Cy Young para el zurdo. Skubal utilizó la experiencia de esa derrota del 14 de junio en su contra, cambiando velocidades e invitando a hacer swings tempranos para acumular outs rápidamente.
Skubal necesitó solo cinco lanzamientos para retirar a los Astros en orden en la primera entrada, comenzando con un elevado ante el primer lanzamiento del venezolano José Altuve. Skubal repitió la hazaña con un quinto acto de cinco envíos, esta vez terminando con otro out de Altuve ante el primer lanzamiento. Sólo otros dos lanzadores desde el 2000 han logrado dos innings de cinco lanzamientos o menos en una apertura de postemporada: el dominicano Johnny Cueto de Kansas City en el Juego 5 de la Serie Divisional de la Liga Americana del 2015, y la leyenda de los Yankees Andy Pettitte en el Juego 2 de la Serie Mundial del 2003.
Skubal no solo retiró a los primeros seis bateadores de Houston, sino que lanzó strikes en el primer lanzamiento a sus primeros siete rivales, y a 17 de 23 durante su salida. Sus rápidos episodios contrarrestaron el inning de 29 lanzamientos que los Astros lo obligaron a hacer en el cuarto, cuando escapó de una amenaza de dos corredores en base con un out, ponchando al dominicano Jeremy Peña y a Víctor Caratini con cambios de velocidad. El grito de Skubal tras ponchar a Caratini se escuchó en todo el interior del Minute Maid Park.