A dos días que inicie el periodo ordinario de sesiones de la nueva Legislatura, el próximo domingo 1 de septiembre, el mandatario indicó que estas modificaciones constitucionales convertirán en derechos muchos de los beneficios que se instauraron en los programas del Bienestar.
Al encabezar la inauguración del Parque Ecológico Lago de Texcoco —que se extiende en poco más de 14 mil hectáreas—, el tabasqueño rememoró que el pasado 5 de febrero envió al Congreso de la Unión un paquete de 20 reformas —18 de ellas constitucionales— a fin de “devolver a la Constitución de 1917 su espíritu revolucionario y popular”.
Así, lanzó ante su sucesora, Claudia Sheinbaum, “dijimos: para reformar la Constitución y que esas 20 iniciativas se conviertan en realidad, se requiere que nuestro movimiento tenga una mayoría calificada. ¿Y qué creen que pasó? ¡Se logró! Y ahí vienen las reformas para que los programas se conviertan de derecho de todo el pueblo”.
En el acto, donde estuvieron presentes los integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra —que defendió estos territorios de la instalación del aeropuerto—, el jefe del Ejecutivo dejó claro que estas reformas, enfocadas en lo social, permitirán que esté quien esté al frente del gobierno de México, “nunca puedan cambiar esos ideales, esos principios, esos beneficios que van a estar elevados a rango constitucional”.
Desde esta antigua e histórica tierra, al oriente del Valle de México, que hace varios siglos fueron gobernadas por el afamado poeta Nezahualcóyotl, López Obrador realizó estas afirmaciones en medio de la polémica que ha generado una de las principales reformas a la carta magna que propuso, la del Poder Judicial, la cual es apoyada y vista como una prioridad por la presidenta electa, Claudia Sheinbaum. Aunque, el mandatario no aludió a esta iniciativa.
La propuesta no ha caído bien en el sector judicial y desde el lunes de la semana pasada trabajadores de ese poder de la Unión se mantienen en paro y han realizado diversas movilizaciones para oponerse a estos cambios, donde el principal es que los jueces, magistrados y ministros sean elegidos por el voto popular.
En una nueva evocación a su adiós tanto del cargo como de la vida pública, el mandatario invitó a quienes quieran conocer más sobre lo realizado en su sexenio a acudir este domingo al Zócalo de la Ciudad de México, donde presentará su sexto y último informe de gobierno.
“Un abrazo cariñoso, amor con amor se paga”, cerró entre la algarabía y los gritos de la multitud —sobre todo integrantes del sindicato magisterial de las secciones del estado de México— que lo despidió entre vivas y el estribillo: “¡Es un honor, estar con Obrador!”.
Por su parte, la presidenta electa destacó la lucha de las comunidades y pueblos del oriente del Valle de México para defender su territorio y evitar la construcción del que se planeaba como el nuevo aeropuerto internacional de la Ciudad de México, que se pretendía edificar sobre el antiguo lago.
Describió el alcance de poner un alto a ese proyecto “neoliberal” se asentó en la placa que minutos antes develó junto a López Obrador. “Esta placa que acabamos develar dice este es un acto de justicia social y de justicia ambiental”.
La futura mandataria agregó: “Y en efecto, este proyecto es un acto de justicia ambiental, porque recupera la tierra, el territorio, las aves, la naturaleza, recupera la vida; y también es un acto de justicia social porque no se nos debe olvidar que aquí se quiso construir aun aeropuerto, y que por ello reprimieron para que no fuera el pueblo que evitara la construcción”.
Sheinbaum adelantó que en su administración habrá una segunda etapa para el Lago de Texcoco. “No vamos a abandonar este parque, lo vamos a seguir consolidando#.