En la cara, la sonrisa de una persona que está a punto de hablar de un proyecto que lleva varios años trabajando. “Estoy muy emocionado, pero siempre da mucho nervio como va a aceptar las cosas la gente pero la verdad que es bien liberador tener un álbum y poder mostrar el producto final y, sobre todo, estar contento tú mismo con él”, cuenta.
Hace dos años, aproximadamente, comenzó a trabajar uno de los primeros temas y desde entonces un continuo ir y venir de ajustes, supo que tenía frente a sí, un nuevo material. “Creo que cuando algo embona perfectamente y literalmente “hace clic”.
Un video colgada en Instagram, donde se percibe un lugar similar a Dubai y, en medio de esa postal de medio oriente, un grupo de hombres a bordo de un vehículo escuchan la música de Clarín León.
En aproximadamente 5 años, el cantante que está a punto de cumplir 35 años de edad , se ha colocado como todo un referente de la música regional mexicana. Su anterior material, Colmillo de leche,lo posicionó en el panorama internacional y, según la plataforma de música por streaming Spotify, consiguió un promedio de reproducciones por día que supera los 13 millones.
Después de este vertiginoso ascenso, ¿cómo se sortea la expectativa? Después del suspiro, León responde: “el problema de cualquier artista está en pensar en complacer a todo el mundo y dejarte de complacer a ti. El principio por el que deberíamos de partir todos los que hacemos música es qué es lo que tu corazón quiere transmitir, qué es lo que tu corazón quiere contar. Cuando yo lo he hecho de esta manera con lo que suena en mi cabeza y en mi corazón, me ha gustado. Creo que la honestidad en la música siempre paga”, sentencia.
El título del álbum, explica, viene de dar con la idea de que las canciones que lo integran hablan de muchos sentimientos muy incómodos y era una manera de responder a la crítica que, con frecuencia, lo tiene en el ojo del huracán. “Desgraciadamente, o lo abrazas o te terminas extinguiendo y para nosotros es reconciliarnos con la gente, reconciliarnos con la crítica y simple y sencillamente darnos cuenta que también todo eso nos hace lo que somos hoy día”, confiesa.
Clarín León es uno de los protagonistas del boom mundial de la música regional mexicana. Sus canciones, como ya ha quedado establecido, se escuchan en países de habla hispana, en territorios anglosajones pero también en culturas tan disímiles como los Emiratos Árabes.
La forma en la que el cantante y compositor explica este fenómeno es por la reinvención de los géneros, las propuestas frescas, a las plataformas y la posibilidad de decisión de los usuarios sobre lo que hoy escuchan, “hoy podemos ver artistas de todas partes del mundo y creo que eso va a hacer que crezca mucho la música y se llene de propuestas más frescas” puntualiza.
“Estoy en el momento en el que hay que pensar en grande, que hay que tirar todas las canicas, vivimos un momento bien particular en la música mexicana que nos está yendo súper bien; es momento de explotar y explotar”
Carin León
El estudio de grabación es un lugar de reflexión, el escenario un “rush de adrenalina bien fuerte, y en esa elipse se desarrolla la carrera de alguien que se define su propuesta como algo fresco y clásico; muy intuitivo, “me gusta mucho este tipo de música que literalmente está hecha de pedazos de todo lo que he ido consumiendo a lo largo de mi vida y es un viaje de pasar por muchas emociones”, explica.
¿Cómo recomiendas escuchar tu música?
“Depende, creo que para todos los momentos pero definitivamente en la borrachera jala muy bien. Un traguito o dos”, finaliza.