La Cámara de Representantes estadounidense aprobó rápidamente este sábado un gran plan de ayuda militar para Ucrania, Israel y Taiwán, al tiempo que votó un proyecto de ley que establece la prohibición de la plataforma TikTok en el país si no corta los lazos con su matriz en China.
Los representantes comenzaron el debate sobre este gigantesco paquete de 95,000 millones de dólares pasado el mediodía de Washington y en muy poco tiempo aprobaron los tres capítulos referidos a Taiwán, Ucrania e Israel, en ese orden.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, saludó la aprobación y dijo que la asistencia militar y económica «salvaría miles y miles de vidas».
El proyecto había logrado recabar apoyo mayoritario bipartidario en los últimos días, tras continuos idas y vueltas.
Antes, comenzaron aprobando la discutida iniciativa sobre la actividad de TikTok en Estados Unidos, la cual ya había generado airada reacción de Pekín.
Los textos deberán ser examinados ahora por el Senado, que podría considerar las iniciativas rápidamente en sesión este martes, señaló el líder de los demócratas en esa cámara, Chuck Schumer.
Ayuda clave destrabada
La iniciativa sobre asistencia para defensa fue presentada el miércoles y es fruto de meses de negociaciones enconadas y de la presión reiterada ejercida ante Washington por Zelenski, así como de aliados de todo el mundo.
La financiación de la guerra en Ucrania era uno de los elementos clave de la iniciativa porque Estados Unidos es el principal respaldo militar de Kiev.
El Congreso llevaba casi año y medio sin aprobar un paquete importante para ese aliado del este europeo, que lucha contra la invasión lanzada por Moscú en febrero de 2022.
El Partido Demócrata del presidente Joe Biden era partidario de conceder más ayuda a Ucrania para su defensa.
Pero los republicanos, con el expresidente Donald Trump (2017-2021) a la cabeza, se mostraron continuamente reacios a financiar un conflicto que se empantana y además condicionaban el paquete a una política migratoria más estricta.
En pleno año electoral, el tema se transformó en un duelo a distancia entre Biden, que aspira a la reelección en los comicios de noviembre, y Trump, su principal rival con intención de volver a comandar la Casa Blanca.
«Balas, no muchachos»
Después de meses de resistencia, el líder republicano de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, dio finalmente su visto bueno a un paquete de 61,000 millones de dólares para Ucrania.
«Para decirlo sin rodeos: prefiero enviarle balas a Ucrania que muchachos estadounidenses», había dicho en rueda de prensa.
Este plan de ayuda -principalmente militar y económica- también autoriza al presidente Biden a confiscar y vender activos rusos, para que puedan utilizarse con el fin de financiar la reconstrucción de Ucrania. Una idea que gana adeptos en otros países del G7.
El Kremlin ya sostuvo que la ayuda que apruebe Estados Unidos no cambiará «nada» en el frente de combate, pero Zelenski insistió en que su país la necesita desesperadamente.
Taiwán, Gaza y TikTok
El primer capítulo aprobado del plan de asistencia de defensa fue el destinado a Taiwán, con el fin de contrarrestar las potenciales amenazas de China contra ese territorio asiático. La isla de gobierno autónomo es considerada por Pekín como una provincia rebelde que es parte de su territorio y por ello amenaza con reincorporarla algún día, incluso mediante la fuerza.
Esa rama del proyecto impulsado por la administración Biden dispone una dotación de alrededor de 8.000 millones de dólares, para que los taiwaneses inviertan en submarinos y otros medios defensivos.
El amplio plan también incluye 13,000 millones de dólares en ayuda militar a Israel, aliado histórico de Estados Unidos que sostiene una guerra contra el grupo islamista palestino Hamás en la Franja de Gaza.
Los fondos se destinarán en particular a reforzar el escudo antimisiles de Israel, la «Cúpula de Hierro».
También se destinan más de 9.000 millones de dólares a «satisfacer la necesidad urgente de ayuda humanitaria en Gaza y otras poblaciones vulnerables en todo el mundo», según un resumen del texto.
Por otra parte, la Cámara aprobó un condicionamiento y eventual prohibición de TikTok en Estados Unidos.
El proyecto establece que la plataforma social debe cortar vínculos con su empresa matriz china ByteDance si quiere seguir operando en Estados Unidos.
TikTok se manifestó tras la votación señalando que la prohibición «violaría la libertad de expresión» de 170 millones de usuarios estadounidenses.
Washington acusa a la plataforma de vídeos de permitir a Pekín espiar y manipular a sus 170 millones de usuarios en Estados Unidos.
Líder republicano bajo amenaza
El presidente Biden ya había advertido a los parlamentarios que «el mundo observa lo que hace el Congreso», como forma de presionar para la esperada aprobación.
Biden se comprometió a firmar la ley tan pronto como haya sido aprobada por ambas cámaras del Congreso.
La adopción de este paquete otorga un respiro a los aliados de Estados Unidos, pero podría costarle el puesto al líder republicano Mike Johnson.
Un puñado de legisladores ligados al ala más conservadora y partidarios del aislacionismo ha prometido hacer todo lo posible para destituir al presidente de la Cámara por haber apoyado el proyecto de ley.
«Nuestro líder republicano está literalmente controlado por los demócratas, les da todo lo que quieren», denunció en la red social X la congresista Marjorie Taylor Greene, partidaria de destituirlo.
Su predecesor, Kevin McCarthy, corrió esa suerte el año pasado tras una rebelión del ala trumpista del partido.