El ejército israelí había indicado anteriormente que mató a diez personas y detuvo a otras ocho en una incursión «antiterrorista» en el campo.
Periodistas de la AFP constataron que el ejército se retiró el sábado por la noche, 48 horas después del inicio de la operación en este lugar objetivo frecuente de estas incursiones a menudo mortíferas.
Un reportero afirmó haber escuchado explosiones y disparos la mañana del sábado, y haber visto explotar al menos tres casas y drones sobrevolar el campo.
Imágenes de AFPTV mostraron vehículos militares y soldados deambulando por los callejones del campo de desplazados, donde viven unas 7 mil personas.
«Las fuerzas de seguridad eliminaron a 10 terroristas durante los enfrentamientos», indicó el ejército en un comunicado, precisando que ocho soldados y un agente de la policía fronteriza resultaron heridos.
El ejército israelí indica que las incursiones tienen como objetivo a grupos armados palestinos, pero es común que los civiles figuren entre las víctimas.
Cuando los soldados se marcharon el sábado por la tarde, los socorristas acudieron a atender a un palestino esposado, con las plantas de los pies laceradas, tendido en la acera.
El Ministerio de Salud de la Autoridad Palestina informó por su parte de «varias personas abatidas y heridas en el interior del campamento» y señaló que el «ejército impide que los equipos médicos ayuden a los heridos».
Esta misma fuente indicó que 11 personas resultaron heridas, siete de ellas de bala y entre las cuales había un rescatista.
Según habitantes contactados por la AFP, ya no hay electricidad en el lugar y la comida escasea. Nadie puede ni entrar ni salir del campamento.
«Esta incursión no tiene precedentes (…), hay francotiradores en los tejados y fuerzas especiales desplegadas», declaró a la AFP Muayad Shaaban, responsable de la Comisión de Resistencia a los Asentamientos y al Muro.
La incursión se enmarca en un contexto de intensificación de la violencia en Cisjordania ocupada desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamas en la Franja de Gaza el 7 de octubre.
Desde que comenzó el conflicto, al menos 479 palestinos han sido abatidos por las fuerzas israelíes o por colonos en Cisjordania.