Un ciudadano de EE.UU. encontró en perfecto estado un iPhone que había caído de un avión que volaba a casi 5.000 metros de altura. Así lo reveló el lunes él mismo en la red social X.
Quien halló el ‘smartphone’ es un diseñador de videojuegos que se llama Seanathan Bates, residente en el estado de Oregón. Lo localizó al lado de una carretera. Se supone que el móvil cayó del avión de Alaska Airlines al que el sábado se le desprendió en pleno vuelo una ventanilla y parte del fuselaje.
Las fotos publicadas muestran que el teléfono ni siquiera estaba inoperativo y seguía en modo avión, con la batería a medio cargar. Todavía había el conector del cargador, que estaba roto, dentro del dispositivo.
El hombre dijo que el teléfono no tenía contraseña y que, cuando lo desbloqueó, descubrió un recibo electrónico de la facturación del equipaje. La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés) informó que era el segundo teléfono caído de la aeronave que habían encontrado.
Un avión de Alaska Airlines, que partió de la ciudad estadounidense de Portland (Oregón) a Ontario (California), sufrió una despresurización el viernes por la tarde después de que reventara una ventanilla y parte del fuselaje se desprendiera en pleno vuelo. Un maestro escolar encontró en el patio trasero de su vivienda el tapón de la puerta que salió despedida de la aeronave, un elemento que puede ayudar a esclarecer las causas de la despresurización.