Existe un planeta con aspecto de un ojo humano que podría albergar vida en su superficie debido a que las condiciones que tiene se parecen a las del Ártico.
Fue en el 2017 cuando el Proyecto MEarth descubrió un exoplaneta al que se le llamó LHS 1140b.
En su momento, los investigadores del proyecto habían determinado que este exoplaneta podría ser un “mini Neptuno”.
Siendo las primeras hipótesis que su masa estaba compuesta por una mezcla de amoníaco, agua y metano.
Sin embargo todo ha dado un nuevo giro a la investigación gracias a los datos arrojados por el telescopio James Webb.
Pues ahora se sabe que el exoplaneta LHS 1140b podría tener las condiciones idóneas para no solo albergar agua en estado líquido, sino también vida.
Planeta que parece un ojo podría tener una composición similar a la de la Tierra
Una de las principales características que tiene este planeta recién descubierto, es que da la impresión de parecer un ojo.
Incluso este aspecto peculiar tiene una explicación, pues de acuerdo con los nuevos datos la formación azul que parece un iris sería un océano líquido.
Mientras que el resto del planeta, que sería lo que parece la esclerótica del ojo, sería un mar de hielo sólido.
Lo que se espera del exoplaneta LHS 1140b es que la parte de la superficie cubierta por el océano tenga una temperatura de 20 °C.
Lo cual es lo suficientemente caliente como para que sea una especie de “tanque habitable” con vida marina alrededor del hielo que rodea el océano.
Investigadores esperan descubrir si el planeta que parece ojo tiene atmósfera como la e la Tierra
Los recientes estudios del planeta que parece ojo, fueron publicados en el en The Astrophysical Journal Letters.
De acuerdo con las investigaciones, el siguiente paso es determinar si su atmósfera es parecida a la de la Tierra.
Pues es probable que sea rica en nitrógeno. Además de que se tardarían unos dos o tres años en descubrir si cuenta con dióxido de carbono.