AGENTES DE LA GN DE TEXAS DISPARAN BALAS DE GOMA A MIGRANTES

La tensión en la frontera de El Paso con Ciudad Juárez continúo ayer, cuando agentes de la Guardia Nacional y policías de caminos de Texas dispararon gas lacrimógeno en contra de un grupo de migrantes que jalaban la malla metálica para poder llegar con los agentes de la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos en el Sector El Paso.

TOMADA DE ELDIARIO.MX

Los disparos hirieron a un venezolano de 26 años de edad, quien se identificó como José Lozada, cuyo rostro se llenó de sangre apenas unos minutos después de que un grupo de migrantes realizaron una manifestación pacífica.

Con cartones en los que escribieron “Queremos paz”, “Somos humanos, queremos paz”, “Tenemos hambre” y “Queremos una solución pacífica, somos humanos, no queremos violencia”, niños, niñas, adolescentes, mujeres y hombres pedían a gritos la ayuda de Derechos Humanos y de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Pero cuando un grupo de hombres comenzaron a jalar la malla metálica instalada por la Guardia Nacional de Texas en el bordo del río Grande, los militares respondieron con los disparos de gases lacrimógenos, los cuales alcanzaron a percibirse hasta el bordo mexicano.

Los mismos hombres reaccionaron aventando palos, piedras y una gorra hacia los uniformados, quienes volvieron a disparar a través del cerco de alambre y púas, mientras que otros migrantes les pedían tanto a sus compañeros como a los agentes estatales no generar violencia.

“Nosotros no tenemos la culpa de lo que pasó ayer, nosotros queremos entrar”, pedía un migrante quien también denunció que los militares les quitaron decenas de pasaportes, actas de nacimiento y cedulas de identidad a las personas que ingresaron el jueves hasta la puerta del muro fronterizo ubicada en el marcador fronterizo número 36, algunos de los cuales los dejaron tirados en la orilla del cerco de alambres y otros fueron quemados.

Después del ingreso masivo del jueves, la mañana de ayer ingenieros de la Guardia Nacional reforzaron la seguridad en la frontera con Ciudad Juárez, con una segunda malla metálica en el bordo estadounidense.

Cerca de 60 militares resguardaron los alrededores del marcador internacional número 36, mientras que dos helicópteros de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP) recorrían la frontera de El Paso con Ciudad Juárez.

Imágenes exclusivas: Les disparan balas de goma y gas lacrimógeno

“Atención, vamos a empezar a instalar alambre de púas…”

Un agente estatal comenzó a recorrer el área, primero caminando con una bocina, y luego a bordo de una tanqueta militar, en la que advertía: “Atención, vamos a empezar a instalar alambre de púas en esta zona, por su seguridad, necesitamos que regresen al lado de México; si dañan el alambre de púas o intentan cruzar serán arrestados”.

Les dieron una hora para salir de Estados Unidos, pero después de que cerca de un centenar de personas permanecieron en el lado estadounidense del rio que divide a México de Estados Unidos, entre El Paso y Ciudad Juárez, agentes antimotines de la Guardia Nacional de Texas rompieron la malla metálica para bajar a la orilla y pedirles a los migrantes que regresen a México.

Los uniformes portaron armas largas, cascos y protectores de oídos, debido al alto volumen con el que se repetía continuamente a las personas que se regresaran a México.

Imágenes exclusivas: Les disparan balas de goma y gas lacrimógeno

Luego de días, semanas e incluso meses de travesía desde países como Venezuela, Nicaragua, Honduras y México, las familias y adultos solteros se quedaron sentados bajo el sol, frente a los militares, mientras pedían agua a gritos.

Finalmente, los agentes colocaron cerca de cien metros de malla metálica en la orilla del río y luego, al llegar a la gente, les bloquearon el acceso hacia el oriente, con una malla vertical sobre el bordo del río.

“Yo creo que es para amedrentarnos, porque unos compañeros míos entraron y entraron normal, y cuando yo llegué hoy me encuentro con esto de que ha habían cercado. Y nunca me esperaba esto, que hubiera alambrado. Esta muy difícil entrar ahora”, dijo Joxua Bracho, de 19 años, proveniente de Maturín, Venezuela.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *