Un abogado del fundador de Wikileaks, Julian Assange, afirmó este miércoles que su equipo legal no vio ningún indicio de resolución de los cargos estadunidenses en su contra, tras la publicación de un reporte del Wall Street Journal sobre la exploración de una declaración de culpabilidad.
El Wall Street Journal informó que el Departamento de Justicia de Estados Unidos está considerando permitir que Assange se declare culpable de un cargo reducido de mal manejo de información clasificada. El periódico citó a personas familiarizadas con el asunto.
Un vocero del Departamento de Justicia se negó a comentar sobre el informe.
«Es inapropiado que los abogados del Sr. Assange comenten mientras su caso está ante el Tribunal Superior del Reino Unido, aparte de decir que no hemos recibido ninguna indicación de que el Departamento de Justicia tenga la intención de resolver el caso y que Estados Unidos continúa con la misma determinación como siempre para solicitar su extradición por los 18 cargos, exponiéndolo a 175 años de prisión», declaró el abogado de Assange, Barry Pollack, en un comunicado enviado por correo electrónico.
El WSJ informó que en los últimos meses funcionarios del Departamento de Justicia y el equipo legal de Assange tuvieron discusiones preliminares sobre un acuerdo de culpabilidad, pero que las charlas «siguen cambiando y las conversaciones podrían fracasar».
Assange está luchando contra la extradición de Reino Unido a Estados Unidos, donde se le busca por cargos penales por la divulgación de registros militares confidenciales y cables diplomáticos estadunidenses en 2010. Washington dice que la divulgación de los documentos puso vidas en peligro.
Los partidarios de Assange dicen que es un héroe antisistema que ha sido victimizado porque expuso las malas acciones de Estados Unidos, incluso en los conflictos en Afganistán e Irak. Si es extraditado, Assange enfrenta una sentencia de hasta 175 años en una prisión de máxima seguridad.
Múltiples grupos de derechos humanos, importantes organizaciones de medios y gobernantes de países como México, Brasil y Australia instaron a que se retiren los cargos contra Assange, que es ciudadano australiano.