El área de inteligencia de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM) en coordinación con personal militar y de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) analizan la procedencia de las llamadas que se recibieron la tarde del sábado en el Centro de Emergencias y Respuesta Inmediata (CERI) en donde se daba aviso de la colocación de aparatos explosivos en cuatro antros y una plaza comercial.
Un agente de la policía de investigación señaló que se recibieron amenazas en el sentido de que un grupo delictivo había colocado bombas en los bares Amadeus, La 4, Joker y plaza Portales, dando un plato de 90 minutos para sacar a la gente de esos negocios que supuestamente iban a ser destruidos.
Mencionó que personal militar fue quien estuvo a cargo de las revisiones de cada uno de los lugares, pero lo primero fue evacuar a clientes y empleados, para disminuir el posible riesgo, indicó el agente entrevistado.
Hay indicios de que una de las llamadas amenazante salió de un teléfono portátil que fue rastreado y el cual fue accionando muy cerca del Cereso Estatal 3, de acuerdo con las primeras investigaciones.
Ayer domingo, autoridades locales mantuvieron un operativo de sobrevigilancia en la zona de bares de la avenida Manuel Gómez Morín, avenida Tecnológico y Tomás Fernández.