El presidente Joe Biden culpó ayer personalmente al presidente Vladimir Putin de Rusia por la informada muerte del disidente ruso encarcelado Alexei Navalny y citó el caso al presionar a los republicanos de la Cámara para que aprueben ayuda militar a Ucrania en su guerra con Moscú.
Pero aunque alguna vez amenazó con imponer consecuencias “devastadoras” a Putin si Navalny moría en prisión, el presidente concedió que no había mucho más que pudiera hacer después de las sanciones y otras acciones tomadas en los últimos dos años en respuesta a la invasión de Ucrania por parte de Rusia.
“No se equivoquen: Putin es responsable de la muerte de Navalny”, dijo Biden en una declaración televisada desde la Casa Blanca. “Putin es responsable. Lo que le sucedió a Navalny es más prueba de la brutalidad de Putin. Nadie debería ser engañado, ni en Rusia, ni en casa, ni en ningún lugar del mundo”.
Al preguntarle si Navalny había sido asesinado, Biden dijo que Estados Unidos no tenía una comprensión completa de las circunstancias. “La respuesta es que no sabemos exactamente qué pasó, pero no hay duda de que la muerte de Navalny fue consecuencia de algo que Putin y sus matones hicieron”.
Momento delicado
La muerte de Navalny ocurrió en un momento delicado en la confrontación de Estados Unidos con Rusia por su agresión en Europa y la represión en su país. Los republicanos de la Cámara están bloqueando 60.1 mil millones de dólares en ayuda militar a Ucrania a instancias del expresidente Donald Trump, quien se jacta de que “alentaría” a Rusia a atacar a los aliados de la OTAN que no gastan lo suficiente en sus fuerzas armadas.