Tras la gran preocupación que Silvia Pinal causó a su familia tras enfermar de influenza y hacerlos pasar una amarga Navidad en el hospital, parece ser que hoy la calma vuelve a su vida y la dinastía más famosa de México respira un aire de tranquilidad.
Luego de ocho días hospitalizada, la actriz muestra significativos avances en su recuperación, así lo informó a la prensa su hija Alejandra Guzmán, a las afueras del centro médico donde se encuentra internada la musa de Luis Buñuel.
“El doctor acaba de hablar con nosotros y nos comentó que la van a pasar al cuarto y de ahí vamos viendo cómo va evolucionando para llevarla a la casa”, explicó la cantante visiblemente emocionada.
Alejandra Guzmán comentó que como parte del tratamiento para su recuperación, el personal médico continúa ayudando a la diva del cine mexicano a expectorar las flemas ya que “son muy densas” y dificultan en una adecuada respiración.
Con el ánimo a tope y gran esperanza, la rockera recordó que la llegada de Silvia Pinal al hospital fue difícil y preocupante debido al cuadro de gravedad que presentaba desde casa.
“Mi jefa… la amo, la adoro, la necesito,la cuido. No vivo con ella pero siempre estoy allí”, expresó para luego revelar las peticiones que le ha hecho su mamá. “Que le pusiera calorcito. Tiene mucho frío, a veces tiene sus manitas muy frías pero veo como es sana, es una persona que siempre ha trabajado, que siempre ha comido bien y no se ha metido cosas malas, ese es el resultado de una persona sana”.
Finalmente, externó su emoción de que pronto del área de terapia intensiva del Hospital Médica Sur puedan trasladarla a piso una vez que logre arrojar todas las flemas que tiene acumuladas en el pecho y la garganta.
“Es una gran noticia que ya la pasen a su recámara, que pueda ver la televisión (como lo pide desde hace unos días) y vea el sol”, concluyó la artista.
Silvia Pinal fue internada durante la madrugada del jueves 21 de diciembre, luego de que sus hijos Luis Enrique y Silvia Pasquel, junto a su asistente Efigenia Ramos, notaron que se encontraba delicada de salud y no había más tiempo que perder.