A finales de agosto de 2020, cientos de aficionados al club de futbol Barcelona se congregaron en las afueras del Camp Nou, estadio del equipo, en Barcelona, España. Con pancartas y banderas del conjunto en mano, los hinchas reclamaban a la directiva blaugrana su incapacidad para retener al astro Lionel Messi.
El argentino había anunciado días antes, mediante burofax, su negativa a continuar en el club por diferencias con el proyecto deportivo del equipo. Los fanáticos tenían un claro culpable del desastre: Josep Bartomeu, entonces presidente del FC Barcelona. ‘Bartomeu Out’, rezaban algunos carteles.
Si bien la salida de Messi se debió a varios factores, incluso económicos, por la crisis del FC Barcelona derivada de la pandemia de Covid-19, los aficionados consideraron que la gestión de Bartomeu fue la culpable, pues también influyó en la partida de Neymar en 2017 y los fichajes deslucidos de Ousmane Dembélé y Phillipe Coutinho.
Diferencias entre hinchas y directivos son comunes en el futbol. Con nula capacidad de decisión en sus equipos, los fanáticos resienten los malos resultados. Algo que la plataforma f20 Sports pretende cambiar.
Stefano Angeli, cofundador de Fan 2 Owner Sports Corporation (de fan a dueño, f2o por sus siglas en inglés), afirmó en entrevista para Grupo REFORMA que la iniciativa busca que los hinchas tengan mayor influencia en los equipos de futbol, convirtiéndose en dueños a través de la compra de acciones bursátiles.
“La tecnología descentralizó otras industrias como la de finanzas, nosotros queremos hacerlo con el deporte tradicional”, manifestó Angeli.
¿Cómo? A través del crowdfunding, mecanismo para recaudar ingresos, algo similar a lo que hace Kickstarter para financiar diversos proyectos creativos de las personas.
Angeli explicó que f2o Sports lanzó un crowdfunding, regulado a través de la Securities and Exchange Commission (Comisión de Bolsa y Valores) de Estados Unidos, para reunir 2 millones de dólares, en la primera ronda de financiación, para comprar un equipo de futbol.
A través de su portal web, una persona, desde cualquier parte del mundo, puede comprar las acciones, que vale 5 dólares cada una. La compra mínima es de seis, por lo que con 30 dólares adquieres una fracción de propiedad del club. Las personas que inviertan más, tendrán mayor peso en las decisiones del club.
Una vez finalizada la primera etapa de recaudación de 2 mdd, se abrirá otra en el que el precio de la acción será de 7.50 dólares. A partir de los 5 mdd obtenidos, la acción variará en su precio. La idea es comprar un equipo en 2024.
Todos los socios tendrán acceso a un dashboard o cuadro de mando mediante un usuario y contraseña. Allí, serán capaces de seguir las estadísticas, manejar la inversión, comunicarte con otros accionistas y jugadores, responder encuestas y tomar decisiones en el futuro del equipo.
Cabe aclarar que si las rondas de financiación no cumplen el objetivo, la empresa ejecutará el proyecto de cualquier manera y a partir de la adquisición del equipo generará recursos para ser una empresa autosuficiente.
Angeli aseguró que el club será de la Tercera División de España de futbol. Esta liga se escogió con base en las facilidades y regulaciones en España.
En España, el marco jurídico de regulación garantiza que los equipos sean rentables. Limita la cantidad de dinero que se puede gastar en los jugadores y a los ingresos por derechos televisivos. Además, no permite que los equipos se la vivan endeudados, señaló Angeli.
El equipo será de tercera división porque es mucho más barato y para empezar desde abajo, es decir, elevar el valor del activo para redituar económicamente a los inversores. Hasta el momento se desconoce qué equipo se comprará.
Angeli esclareció que los inversores no adquirirán deuda. La empresa creada para dirigir al club, dependiente de f2o Sports, se encargará de los gastos como mantenimiento de cancha, pago de jugadores y directiva deportiva.
“Queremos cambiar a la industria, reinventarla. Queremos darle a los fanáticos, que son los que ponen el dinero, la pasión, el tiempo, el canto, el grito, la propiedad”, finalizó Angeli.