El descubrimiento y la proliferación de laboratorios de fentanilo en Canadá provoca una crisis que se podría extender desde el sur al norte del país.
De acuerdo con medios locales, la crisis se ha fortalecido debido a que la frontera norte es la menos patrullada y físicamente abierta, lo que aumenta el potencial de contrabando.
Las autoridades locales investigan los sólidos lazos comerciales entre Estados Unidos y Canadá después de que el gobierno estadounidense impusiera sanciones contra una empresa de Vancouver a la cual se le señaló como implicada en la fabricación de fentanilo.
La emergencia podría convertirse en un desafío que empeoraría la epidemia de opioides en ambas naciones en caso de que no se controle.
Pese a los operativos en ambas naciones, los resultados de la búsqueda de laboratorios clandestinos de fentanilo se ha intensificado pero con pobres resultados por parte de las autoridades.