La décima noche consecutiva de protestas ante la sede nacional del partido socialista PSOE en Madrid, en contra de la amnistía a independentistas catalanes y otros pactos para la investidura de Pedro Sánchez, acabó sin incidentes al filo de la medianoche de este domingo.
Unas mil 200 personas, según la Delegación del Gobierno, se volvieron a reunir desde últimas horas de la tarde en la madrileña calle de Ferraz, donde corearon consignas como “La misma mierda son Marlaska y Puigdemont”, “Pedro Sánchez, queremos tu pescuezo”, “Que te vote Txapote”, “Si tienes cojones convoca elecciones” y “España reclama ser soberana”.
Sobre las 23:00 horas (22 GMT), los agentes abandonaron el cordón policial e instaron a los manifestantes a abandonar las inmediaciones de Ferraz, a lo que varias decenas de personas se resistieron.
A diferencia del sábado, cuando hubo 13 detenidos y siete heridos leves, este domingo la concentración transcurrió de forma pacífica y los servicios de emergencia de Madrid no tuvieron que atender a nadie.
Algunos de los participantes exhibieron banderas de España, alguna con la cruz de Borgoña (bandera monárquica española más antigua que la actual), y portaron pancartas en las que se podía leer “Felipe VI, para esto” o “No amnesty. SOS Europe”.
Por otra parte, unas 150 personas, según la Delegación del Gobierno en Madrid, en su mayoría varones jóvenes, convocados por Junta Democrática, algunos de ellos con banderas de España, se concentraron en las proximidades del Congreso de los Diputados, en la plaza de Neptuno, mientras la Carrera de San Jerónimo permanecía vallada.
Algunos de los asistentes acudieron con mochilas, sacos de dormir y tiendas de campaña con la intención de acampar en las cercanías del Parlamento.
Pacíficos y unidos por la democracia”, “Límites y control al poder”, “No es sanchismo, es partitocracia” y llamamientos a la abstención son los lemas que se podía leer en algunas pancartas.
Por la mañana, cientos de miles de personas se sumaron este domingo a las protestas convocadas por la derecha en toda España contra la amnistía a los independentistas catalanes, cuyos votos son indispensables para la investidura del líder socialista, Pedro Sánchez, como presidente del Gobierno para los próximos cuatro años.
Sánchez cuenta ya con el apoyo de distintas formaciones para su investidura por otros cuatro años más, entre ellas independentistas catalanes a cambio de una ley de amnistía a procesados por el proceso independentista en Cataluña que derivó en una declaración unilateral de independencia en 2017.
La votación de la investidura se espera la próxima semana, aunque aún falta por fijar el día.