Una supuesta violación territorial en uno de los 311 puntos que delimitan la frontera entre República Dominicana y Haití originó una nueva disputa que ha elevado las tensiones entre ambos países.
El canciller dominicano, Roberto Álvarez, se pronunció el jueves sobre la situación a propósito de la confrontación que hubo el martes entre militares dominicanos y miembros de una brigada ambiental del gobierno haitiano por el patrullaje de los primeros en una zona conocida como “La Vigía” que los funcionarios haitianos consideran que está de su lado fronterizo.
Ambas partes reaccionaron tomando sus armas y colocándose en posición de ataque, mientras un grupo de civiles haitianos protestó incendiando neumáticos y lanzando piedras.
Los límites fronterizos entre República Dominicana y Haití están definidos con 311 pirámides de concreto, enumeradas de norte a sur, pintadas de amarillo, con las letras RD o RH en alusión al país donde se encuentran y la fecha 1929, cuando se acordó esa delimitación.
El hecho ocurrió en la zona de la pirámide número 13, en la frontera norte.
Inicialmente, el gobierno dominicano calificó la situación como una aparente malinterpretación de los haitianos a los límites fronterizos que separan a ambos países.
Sin embargo, el pronunciamiento del jueves del canciller dominicano elevó el tono al alegar que las violaciones territoriales han continuado.
“Hacemos un enérgico llamado a las autoridades haitianas para que asuman el control del orden en su territorio y eviten situaciones que sigan agravando la ya delicada situación”, dijo Álvarez en rueda de prensa.
Y añadió: “Solicitamos al gobierno haitiano una ratificación pública, informando que no cuestionan en ninguna medida la actual delimitación fronteriza, basada en los acuerdos de 1929, 1935 y 1936”.